miércoles, 18 de junio de 2008

No me toques las bolas

Hace años, tantos que ya no recuerdo ni que estaba comiendo ese día encendí el televisor y me quede pegado a la pantalla, viendo las peripecias de un chaval dando guantazos superando el estilazo de Bud Spencer y con una cara de pardillo que no conseguía quitársela ni a puñetazos.

He de decir que me maravillo, me fascinaron esos dibujos animados… Un chaval repartiendo leña con un grupito de amigos mientras perseguía un objetivo (no querido lector de menos de 20 años, no estoy hablando de Naruto). Dragon Ball marco mi infancia y la de muchos otros, todos fantaseemos en su día con esa serie y nos hemos divertido durante años con las aventuras de Goku (en declive, todo sea dicho). Pero lo que en principio es señal de alegría se esta convirtiendo en una inmensa nube negra que amenaza con jodernos el día…

El rodaje de una película basada en una de tus series favoritas acostumbra a sacar lo peor de nosotros mismos, quejándonos por todo lo malo que han hecho y lo mucho que la han cagado con la historia, el transfondo de personajes, que el traje de lobezno es amarillo (bueno, los lectores de cómics sabéis perfectamente a lo que me refiero). Pero que pasa cuando la cagan con algo que la mayoría empecemos a seguir desde que tenemos uso de razón? En que se convierte un mito cuando lo desgarran hasta el punto de cambiar incluso la historia principal?

Pues simple… Nos encontramos con una película de Dragon Ball en que no habrá un solo torneo de artes marciales, una película de Dragon Ball en que Goku va al instituto (si alguna vez ese tío hubiese ido al instituto no seria retrasado, coño), una película de Dragon Ball en que el maestro Mutenrohi, Follet Tortuga para los amigos catalanes, tiene pelo en la cabeza y que seguramente no es un viejo verde (por eso de que los niños pequeños puedan verla y tal).

Pues eso, hoy, navegando por internet han destrozado lo poco que quedaba intacto de mis sueños infantiles… Lo primero que me arrebataran el chupete, mas tarde la decepción con Santa Claus y ahora Dragon Ball…



Este no puede ser Goku...